3/08/2008

Herencias



Hace una semana tuve la fortuna y el placer de entrevistar a Arturo Tamayo, uno de los mejores directores de orquesta del mundo. La entrevista será publicada el próximo mes de abril, en Audio Clásica , y creo que es una de las mejores que he hecho en mi vida. El mérito es todo suyo, obviamente. Hablamos sobre sus primeros conciertos en Madrid, durante la fase final del franquismo, sobre Iannis Xenakis, con quien mantuvo una relación privilegiada, y sobre el arte de dirigir una orquesta. Casi al final de nuestra conversación, mostró su desacuerdo con quienes critican su hábito de dirigir obras de compositores de renombre internacional en sus presentaciones en suelo patrio. Tamayo llegó a afirmar que las orquestas españolas no tienen por qué tener el deber de interpretar repertorio español, sino al contrario, tocar preferentemente el repertorio internacional. A mí se me ocurrió que ese proteccionismo no dejaba de ser una herencia del aislacionismo franquista. Ojalá fuese la única.