3/31/2007

Una no gana para sustos

Lectora compulsiva del blog de Arcadi Espada y de otros soportes en los que fija su prosa, me quedé atónita cuando me tropecé con su opinión acerca del canon y sus bondades disciplinares para este país de copiones. Me acabo de recuperar del susto leyendo este post en el blog de David Bravo.

3/30/2007

Pizarro/Jurowski/LPO

Não tinha previsto voltar por aqui, mas isto vale a pena. São ecos, retirados das páginas de The Times, do concerto "Egípcio", de Saint-Saëns, que Artur Pizarro tocou anteontem no Queen Elizabeth Hall de Londres. A leitura do artigo pode preceder a desta outra crítica, que ecoa o sucesso do recital que o pianista deu em Sevilha, no passado dia 6.

Preço zero?

No Remixtures - via TubarãoEsquilo - encontrei este esclarecedor resumo das últimas intervenções disponíveis na net relativas à viabilidade a médio prazo do mercado da música gravada.

Hoje acordei virada para a transcendência

Há concertos que te levam de volta à segurança do amor primeiro, ao momento em que decidiste que a vida sem música não era vida, embora parecesse que podia ser vivida. Que se lembram indefinidamente e que tiram a vontade de regressar tão cedo a uma sala de concerto, porque tens a certeza de que irás ser desiludida.

Riccardo Muti e a Philharmonia Orchestra deram esta semana um concerto assim. Foi na passada segunda feira, no Auditorio Nacional de Madrid. Tivemos uma sinfonia nº 35 de Mozart "clássica", alla Karl Böhm; o poema sinfónico Les Preludes, de Liszt, transformado em puro jogo de sonoridades; e, por fim, a Sexta de Tchaikovsky.

Muti é um dos melhores intérpretes da música do compositor russo. A "Patética" acompanha-o há anos. Rotina, porém, não é palavra que entre no seu vocabulário. Torna-a numa jóia de som, polida com precisão nas suas múltiplas texturas e facetas e com a sua subtil estrutura à mostra. Tenho a impressão de que os músicos não falharam nem uma das cambiantes indicações de dinâmica com que Tchaikovsky encheu a sua partitura. Mas Muti também encara Tchaikovsky como o compositor moderno, corruptor dos nervos, que foi. Ou seja, sem visos de patetismo pedante. O incrível é que, na escuta, torna possível que a contemplação fascinada e a "concentração para dentro" surjam em simultâneo.

Colisões

E, se calhar, escutámos os mesmos bonecos autómatos.

3/29/2007

Leveza

Leve é o pássaro:
e a sua sombra voante,
mais leve.

E a cascata aérea
de sua garganta,
mais leve.

E o que se lembra, ouvindo-se
deslizar seu canto,
mais leve.

E o desejo rápido
desse mais antigo instante,
mais leve.

E a fuga invisível
do amargo passante,
mais leve.

Cecília Meireles,
Mar absoluto e outros poemas (1945)

3/26/2007

Conchas



Espero verlas en Salamanca. Me voy dentro de un rato. Estos días el blog permanecerá cerrado por máster.

Barítonos

La mejor manera de apaciguar los nervios es entregarse a una tarea colosal. Se me ocurre como ejemplo archivar los ficheros del ordenador. En mi caso, ése es un proyecto siempre pendiente: por lo visto, todavía no me he acercado lo suficiente al borde del ataque... de nervios. Hoy, sin embargo, me ha dado por empezar a organizar las notas de programa que, desde hace años, tengo dispersas entre tres ordenadores, un disco duro y dos lápices USB. En plena faena, me he acordado de unas que hice en 2002 para el São Carlos, acerca de la adaptación del drama El Trovador, de García Gutiérrez, para Il Trovatore, de Giuseppe Verdi y Salvatore Cammarano.

No las he encontrado, por su puesto, pero, relacionándolas con un artículo que Gabriela Gomes da Cruz publicó en el volumen de la Revista Portuguesa de Musicologia en 2000 y que he tenido que consultar este fin de semana por otras razones, me dio por pensar de nuevo en el personaje del Conde di Luna. En dicho artículo, Gabriela refiere la pasión por los barítonos nacida en la segunda mitad del siglo XIX en el contexto de la recepción de L'Africaine, de Meyerbeer, en Lisboa. La referencia bibliográfica sobre el tema es The Verdi Baritone, de Geoffrey Edwards y Ryan Edwards.

A mí me caen fatal tanto Leonora como Manrico: la primera es una niña pija y el segundo, un inconsciente. De forma natural, mis simpatías van hacia ese barítono despreciado y esclavo de las obligaciones de su clase. Ahora, es cierto que Verdi y Cammarano presentan una versión del personaje que se aleja de la original. En la pieza de García Gutiérrez, el Conde de Luna es un ejemplo perfecto del execrable perseguidor de doncellas indefensas, típico del teatro sentimental. Un malo malísimo sin fisuras.

Y quien habla del Conde di Luna, habla de Ettore Bastianini. Aunque, viendo y escuchando lo que tenemos disponible en youtube, Robert Merrill y Giorgio Zancanaro no se quedan atrás.

3/25/2007

Espelhos

Através do blog do Álvaro (leiam a entrevista que fez ao Pierre Boulez, o qual utiliza, vejam só, a edificante expressão "período disciplinar") cheguei a um outro blog, Divas & Contrabaixos, onde encontrei estas fotos da minha mesa e do quarto da minha filha. A autora anda a escutar Lura cantando "Na ri na", do saudoso Orlando Pantera. Este mês, cumpriram-se seis anos sobre a sua morte.

Nervios

En 1886, Friedrich Nietzsche se refirió a la música alemana reciente en los siguientes términos: es “la mayor corruptora de los nervios, doblemente peligrosa para una nación perdida por la bebida y que honra la oscuridad como si fuera una virtud”. Más o menos a partir de esa fecha, se generalizó en la crítica musical germana la idea de que la nueva música tenía un poder especial sobre los nervios, reconociendo la capacidad que tenía de narcotizarlos e intoxicarlos.

El crítico conservador y nacionalista alemán Walter Niemann, describió, en 1913, así esta nueva situación: “La música ha pasado a ser, de heraldo de la vida espiritual humana a través de ideas musicales significativas y originales, de la expresión sin mediaciones de nuestro corazón y de nuestras emociones, el instrumento tímbrico más sensible de nuestros nervios y de nuestros estados de ánimo. La música ha dejado de vehicular sentimientos y asuntos poéticos, pictóricos, psicológicos y filosóficos para transformarse en un arte de nervios, emociones y timbre, definida externamente.” La asociación entre la idea de sonoridad y la excitación nerviosa que producía fue uno de los tópicos que se sucedieron en la crítica, acompañando el proceso de emancipación del timbre en el ámbito de la composición.

Otra cita, ésta retirada de un estudio del influyente musicólogo Carl Dahlhaus dedicado a la música del siglo XIX, resume claramente este proceso, definidor de la música del cambio de siglo: “se libertó el color de su función subordinada de mero clarificador de la melodía, del ritmo, de la armonía y del contrapunto de una pieza, y se le dio una razón estética de ser y un significado por sí mismo."

La música de Wagner y su recepción determinaron en gran medida este camino. El fragmento de Nietzsche, corresponde a la fase en que éste ya se había liberado del dominio del hechicero Wagner y puede ser entendido como una especie de síntoma de curación. Como contraste, podemos recordar el célebre ensayo publicado en 1861 por Baudelaire a propósito de Tannhäuser, cuyas “rêveries” musicales son comparadas a los falsos paraísos creados por el consumo de opio.

En su escrito, Baudelaire subraya la “intensidad nerviosa, la violencia en la pasión y la voluntad” de la música del compositor alemán, afirmando que, a través de esa pasión, “comprende todo y hace que todo se comprenda. Todo aquello que implican las palabras voluntad, deseo, concentración, intensidad nerviosa, explosión se siente y se adivina en sus obras.” El poeta parte de una idea de arte peculiar: “En materia de arte, confieso que no detesto el exceso; la moderación nunca me pareció síntoma de una naturaleza artística vigorosa. Amo los excesos de salud, esos desbordamientos de la voluntad que se inscriben en las obras, tal como el asfalto inflamado en el suelo de un volcán, y que, en la vida cotidiana, marcan a menudo la fase, plena de delicias, que sucede a una gran crisis moral o física.”

3/24/2007

Vámonos a Simorgh



Conocí la semana pasada al último compositor de mi vida. Se trata de José María Sánchez Verdú, a quien tuve el placer de entrevistar con el pretexto del próximo estreno de su ópera El Viaje a Simorgh. Basada en el libro Las Virtudes del Pájaro Solitario, de Juan Goytisolo, es un encargo del Real.

El caso es que, cuando fue el "caso Azúa" (que tuvo algún eco en este blog), no fui demasiado simpática con su intervención. O mejor, me pareció tan importante que Azúa escribiese lo que escribió, que lamenté que Sánchez Verdú se colocase en el lado equivocado, por muy aceptables que pudiesen ser los argumentos. Lo curioso es que, cuando le hice la entrevista, no me acordaba, ni de aquella polémica, ni de que él hubiera participado en ella: dos años son una eternidad, como se sabe.

En retrospectiva, me da la impresión de que, al final, estaban hablando de lo mismo. Al menos en la medida en que Sánchez Verdú está muy lejos de la figura del compositor ensimismado y visionario que asociamos a la figura de Schoenberg y a la "vanguardia" en general. De hecho, una de las cosas que más sorprendieron es la capacidad que el compositor español tiene para absorber y reelaborar materiales. Todavía, su concepción del sonido como una especie de material fisiológico que "moldea" con manos de artesano está alejada de los métodos más aritméticos, pase la expresión, que tienen su origen en el dodecafonismo.

Sánchez Verdú me parece, como digo, uno de los compositores del presente que trabaja de forma más sensible el sonido, asociándolo con experiencias sinestésicas que incluyen luz, colores y también sabores y aromas. Lo confirmo porque me pasó una cosa rarísima en la T1 de Barajas - uno de los sitios más feos de España - leyendo y escuchando la partitura de Gramma o Jardines de la Escritura, la ópera que hizo antes de El Viaje a Simorgh. Yo, que hasta he llegado a ridicularizar a los admiradores de Scriabin porque decían que veían luces cuando escuchaban su música... - me vi envuelta en aromas de flores escuchando uno de los números ("Jardín de Adonis"). Y no, graciosillos, os aseguro que confundí el olor de ningún pincho de tortilla con el del jazmín...

Sánchez Verdú me contó después que la puesta en escena integra a los espectadores en el espectáculo y me dejó con ganas irme a Venecia, si se confirma allí la reposición de la obra. Con sus palabras:

El público esta situado debajo de la orquesta, a dos metros, y interactúa con la obra. Cada oyente se sienta en un pupitre, en el que se encuentra un libro: la escenografía está en sus páginas y, por lo tanto, también acaba por surgir en la imaginación del público. Éste no ve en ningún momento ni a los cantantes, ni a la orquesta. La obra es una reflexión sobre la escritura, de ahí la importancia dramatúrgica de ese libro. En él se encuentran fijados dibujos, textos, comentarios, palimpsestos, laberintos… Al final se encuentra un CD, que es otra forma de escritura, con el resultado sonoro de la obra fijado en un soporte de nuestra época.

También puede ser leída esta excelente crítica, que describe la experiencia del público.

Además, fascinado por las posibilidades de la intertextualidad, Sánchez Verdú crea en sus obras diálogos, no sólo con la historia de la música occidental, sino con todo tipo de manifestaciones artísticas y culturales del presente y pasado. En su concepción de la composición parte del modelo de la arquitectura, pero, para él, lo más importante es que es que sus composiciones “respiren” como si fueran seres humanos. Defiende que, aún siendo una forma de conocimiento, la música debe ser concebida para ser sentida...

La entrevista saldrá en la revista Audio Clásica, ahora renovada, el próximo mes de mayo.

Primavera em Castelo Branco




Carlos Semedo, um dos organizadores do Festival de Música de Castelo Branco, teve a amabilidade de me enviar o interessante programa da edição deste ano. Pode ser consultado aqui.

Acho que valerá a pena marcar na agenda os dias 11 e 13 de Maio, que é quando Bruno Borralhinho (na foto) vai tocar a integral das suites para violoncelo solo de Bach. Nos dias 9 e 10, o nosso saudoso ex-colega de blogosfera, César Viana, vai apresentar essas obras num curso livre que terá lugar no Cybercentro da cidade.

3/23/2007

bravopinamonti@gmail.com

COMUNICADO

Os signatários, exercendo ou tendo exercido a actividade de críticos musicais, seguiram com particular atenção ao longo de seis anos a programação do Teatro Nacional de São Carlos sob a direcção de Paolo Pinamonti. Como críticos, têm os signatários opiniões diferenciadas sobre as propostas artísticas dessa direcção e suas realizações. Mas nunca os signatários se haviam reunido como o fizeram para prestar o seu reconhecimento a Paolo Pinamonti, no momento em que vêem interrompida a continuidade de uma direcção que, face a repetidos constrangimentos orçamentais, tinha manifestado um esforço e uma imaginação continuadas em tentar responder às missões de um teatro nacional de ópera e aos níveis artísticos desejáveis.

Mais entendem os signatários não só não serem compreensíveis os termos expeditos com que a tutela dispensou quem tanto tinha prestigiado o São Carlos, como observam com preocupação que um exercício de arbitrariedade política possa interromper a continuidade de trabalhos artísticos, para mais constatando que os responsáveis do Ministério da Cultura procederam ao contrário do disposto no programa do governo, no sentido da existência de "direcções artísticas menos dependentes da lógica de nomeação governamental".

Nestas circunstâncias gravosas, entendem os signatários que é devida uma pública homenagem a Paolo Pinamonti, pelo que convidam todos os que se queiram associar para um jantar que terá lugar na próxima segunda-feira, dia 26, no Hotel Vila Galé Ópera (Travessa do Conde da
Ponte, junto ao edifício da Orquestra Metropolitana de Lisboa), pelas 20h30. As inscrições e confirmações poderão ser feitas através do mail: bravopinamonti@gmail.com , ou por sms para até ao próximo sábado, às 20h00. O pagamento, no valor de 26,5 euros, será efectuado à entrada.

Alexandre Delgado
Ana Rocha
Augusto M. Seabra
Bernardo Mariano
Cristina Fernandes
Henrique Silveira
João Paes
Jorge Calado
Maria Augusta Gonçalves
Rui Vieira Nery
Teresa Cascudo
Vanda de Sá

3/21/2007

Ondine

Et comme je lui répondais que j'aimais une mortelle,
boudeuse et dépitée, elle pleura quelques larmes,
poussa un éclat de rire, et s'évanouit en giboulées qui
ruisselèrent blanches le long de mes vitraux bleus.

Hmmm, primavera!



Es lo que queda después de un breve paseo por youtube buscando algo que reflejase ese particular estado de espíritu. No han pasado la criba ni la Varady, ni la Fleming cantando Strauss. Ni, mucho menos, el descubrimiento de que en Italia una canción bastante cursi que se titula "Maladetta Primavera" es una especie de clásico. Pero es que Sarah Vaughan es única.

Espero además que sea un feliz síntoma de que ya se me ha pasado el ataque de wagnerismo del que he estado aquejada durante los últimos días. Lo peor es que todavía tengo que mandar las críticas de la Valquiria de Vick y del Anillo de Colonia al editor de Mundo Clásico...

3/20/2007

Também há boas notícias

O Tónica Dominante está de regresso. Bem-vindo, de novo, à blogosfera!

Bem-vindo a Lisboa, Herr Dammann!

Compreendo os comentários do Araúxo. Gostava de partilhar o seu optimismo. Não posso, contudo, deixar de concordar com Augusto M. Seabra – o qual, com outras palavras, tem denunciado a estratégia de introdução de controleiros nas estruturas ministeriais de produção cultural - quando coloca o acontecido com Pinamonti nessa mesma linha de actuação.

Sobretudo, julgo que a ideia do novo teatro de ópera que vai nascer das suas cinzas após esta operação e que, entre outras coisas, vai atrair turistas, inovar “no repertório, na prática de encenação e de representação”, criar escola de canto e acalmar a sede de lírica das criancinhas portuguesas está muito próxima da alucinação. É megalómana e irrealista atendendo ao subfinanciamento histórico da instituição e, já agora, também às condições da própria estrutura e do edifício. Só pode acreditar nela quem não as conhece. Surpreendentemente, ou não, parece estar nesta situação o substituto de Pinamonti, o qual disse, por exemplo, na conferência de imprensa da semana passada que “caso as características técnicas do S. Carlos o permitam, é também seu desejo ter em cena duas produções em simultâneo”.

O que tem acontecido com Pinamonti tem, finalmente, alguma relação com o processo que levou, em 2003, Christoph Dammann para a Ópera de Colónia. A pessoa que tinha sido inicialmente indigitada para o lugar, Barbara Mundel, foi despedida sem explicações. O escândalo teve repercussões nacionais. Numa leitura positiva, o que se passou em Colónia em 2003 poderia indiciar que o novo responsável pelo São Carlos tem alguma habilidade pessoal para lidar com políticos: na altura era apenas um doutorado de 39 anos, sem experiência prévia no domínio da gestão de teatros de ópera. Hoje, os dados de que dispomos são os seguintes: Dammann aguentou-se no lugar apenas quatro anos; não conseguiu incrementar o orçamento destinado pela cidade à ópera; e, pelo que tenho lido e pelas minhas conversas de corredor em Colónia, sai dali sem deixar saudades.

3/16/2007

Mais do mesmo

Encontrei a resposta ao meu anterior post no PÚBLICO de ontem, numa peça onde se dá conta da morna reacçao que tem provocado em Colonia a saída de Dammann. Ou seja, confirma o que eu vi no passado fim de semana, no domínio resgringido da ópera, o que foi feito ali é comparable, quando não melhor, do que tem sido feito em Lisboa.

A diferença, essa, está na orquestra que, apesar de ligada ao teatro, tem conseguido graças ao seu maestro titular (e actualmente responsável artístico por toda a actividade musical da cidade de Colonia), Markus Stenz, apresentar um trabalho que começa a distingui-la no panorama europeu. Posso aliás imaginar que o próximo capítulo deste folhetim hermenêutico será o dedicado à articulação da Orquestra Sinfónica Portuguesa com o Teatro de Sao Carlos e à definição da partilha do espaço cultural e orçamental da capital pela OSP com a Orquestra Metropolitana de Lisboa, também financiada pelo Ministério da Cultura.

E não, Eduardo Pitta: neste "diz-que-diz" há também argumentos. Fait divers são os dados que publicou no seu blog, com demagogia pseudoestatística. O São Carlos, como estrutura, não se reduz, nem à ópera, nem ao que faz dentro do Teatro. Na era Pinamonti incluiu centenas de colaborações e de co-produções que asseguraram uma actividade quase diária. Nota-se que fala daquilo que não frequenta.

Pinamonti, neste "diz-que-diz", apresenta argumentos que são contundentes, tais como os que são reproduzidos a seguir, retirados da entrevista que concedeu esta semana ao PÚBLICO. À pergunta "O secretário de Estado quer "atrair novos públicos". Que diz?", ele responde:

Se me permite, isso são slogans sem conteúdo. Quando cheguei há seis anos havia 900 assinaturas, hoje há 2200. Só com os assinantes ocupamos mais de metade da sala em todas as récitas. A taxa de ocupação do São Carlos é hoje de 90 por cento, isto para mim é um grande exploit. É claro que dizer que o Estado paga 350 euros
por espectador como o Diário de Notícias faz hoje [ontem] é factual, mas injusto e uma operação de hermenêutica incorrecta, pois compara dados incomparáveis. Como se pode comparar o São Carlos à Ópera de Paris, que tem mais do que uma sala e ao todo 5000 lugares? E onde o lugar mais caro custa 150 euros, quando no São
Carlos são 60? Comparar o São Carlos com as óperas de Barcelona, Roma, Paris, Milão, é uma operação de má-fé. Temos que comparar o São Carlos com teatros comparáveis - o La Fenice, em Veneza, Bolonha, Toulouse. No Alla Scala há bilhetes a 240 euros. É interessante que Mário Vieira de Carvalho compare o São
Carlos com os teatros das grandes elites europeias, e use teatros para ricos como modelo.Alem disso, é demagógico. Quanto é que custa, por português, o Ministério da Cultura? Se continuamos neste caminho, é demagogia atrás de demagogia. O teatro lírico é um serviço público, como o de uma colectividade, como a universidade, é o Estado que tem que assumir os custos maiores, é claro que com uma boa gestão e eficácia. O São Carlos, nos seis anos que aqui estive, nunca se endividou e nunca pedidiu um reforço orçamental. Vieira de Carvalho quer que "o público não encontre a ópera fechada nem os bilhetes esgotados". Como se faz isso? Depois de ver que o público respondia bem comecei a aumentar o número de récitas de óperas como Così fan tutte, Turandot, La Traviata, L'Italiana in Algeri, que terá oito récitas, A Valquíria, que teve sete récitas, o ensaio geral aberto e mais duas transmissões no largo... É evidente que se poderia fazer mais mas é preciso mais orçamento.

3/13/2007

Pinamonti/Dammann

Casualmente, cheguei ontem de Colónia . Fui ver o Anel-Compacto. Gostei mais do que tenho visto da encenação do Vick do que da de Carsen - que a Ópera de Colónia utiliza para esta maratona e que é, mesmo assim, boa - e os cantores foram, globalmente, comparáveis aos de Lisboa.

Agora, a Gürzenich-Orchester Köln, maravilhosamente dirigida por Markus Stenz... Para perceberem, é só clicar aqui e escutar algum excerto das sinfonias de Shostakovich tocadas por eles.

Ali, lembrei-me de uma conversa de escada que mantive com uma das violinistas da OSP, num dos intervalos da Valquíria. Coitada, estava à beira do esgotamento por culpa da prolixa pena wagneriana. Quando lhe contei que ia escutar a Tetralogia, ao vivo, interpretada ao longo de um fim de semana e por uma única orquestra achou, claro está, absolutamente impossível. Agora, com o anúncio da substituição de Paolo Pinamonti por Christoph Dammann, lembrei-me de novo da história. ¿Por qué será?

3/06/2007

Dominación femenina



Pierre Bourdieu llegó a proponer la construcción de una historia de la ropa femenina como una historia del adiestramiento del cuerpo femenino. Graham Vick y Timothy O'Brien, en La Valquiria que está en escena en Lisboa, muestran los efectos ambivalentes de ese adiestramiento.

Casi diría que, por su parte, Vick está consiguiendo, además, realizar una "restauración" de la obra de Wagner.

Felizmente, a los tradicionalistas que no han apreciado las vamp-valquirias que se exhiben estos días por el São Carlos, siempre les quedará esto:

3/02/2007

Temos uma nova crítica na praça

Laurinda Alves. Hoje, no novo Público colorido. Uma página só para ela. 2000 caracteres de prosa infantil e desajeitada dedicados à Valquíria. Às peças da secção de Cultura, despromovida ao mesmo P2, foi dado aproximadamente o mesmo espaço que a esta senhora.