5/02/2007

Prodigio difundido a escala planetaria

Esto es, desde luego, admirable. Se puede completar con la lectura de este artículo, en el que se cuenta la vida del joven músico, que entonces tenía 12 años. Ahora, con el reciente lanzamiento de su quinta (una casualidad, claro) sinfonía grabada por la Orquesta Sinfónica de Londres y con sendos contratos firmados con la empresa IMG Artists y con la Sony, Jay Greenberg se ha convertido necesariamente en un prodigio difundido a escala planetaria.

Lo que se escucha en la página no me ha interesado demasiado desde el punto de vista musical. Puede que sea porque esta semana, en Historia de la Música del siglo XX, estamos con el tema dedicado a la música electroacústica. Se explica, por lo tanto, por una cuestión de perspectiva histórica.

Espero, sobre todo, que el chico conserve el sentido del humor. Me parece que le va a hacer falta. Es que, por mi parte, no he podido evitar una sonrisa al leer las siguientes afirmaciones del responsable de la etiqueta Sony BMG Masterworks, donde la OSL ha grabado la tal quinta sinfonía:

"Jay and his music represent the future, and I believe his work symbolizes the renewed confidence we at Sony BMG Masterworks have in the future of classical music,” Hetherwick said, in announcing the signing. “Obviously, what caught our attention was the fact of his age and accomplishment. Beyond that, the passion, the authority and the confident spirit in Jay’s music speak impressively for themselves. I think that a broad, young audience is about to make this remarkable discovery."